Sr. Director:
Durante el segundo gobierno de Michelle Bachelet se dictaron una serie de medidas con la Ley de Inclusión, limitando al máximo la posibilidad a que se fundaran nuevos colegios particulares subvencionados. De esta manera se puso un cerrojo para entregar así otra alternativa a las familias. Sin embargo, dentro del protocolo de acuerdos para el Presupuesto 2024, se propuso la modificación de la llamada “demanda insatisfecha”. Lamentablemente, el proyecto enviado por el ejecutivo con fecha de 15 de enero recién pasado, no mejora en nada la situación. Es decir, no basta que las familias estén insatisfechas con la oferta que tienen, si viven en esa zona y existen colegios con asientos libres, los estudiantes no tienen más opción que asistir al colegio que lo tiene capturado por malos resultados que tenga. Creemos que es imprescindible terminar con la aberración de la demanda insatisfecha, que no es más que una garantía de captura de alumnos para los malos colegios. Un colegio bueno no va a perder sus alumnos porque aparezca otro. Esto lo único que hace, es retener a los estudiantes como rehenes y limitar nuevas oportunidades educativas de calidad.
María Teresa Romero
Valentina Rebolledo
Jazmín Aravena
Deborah Nun
Escuelas Abiertas
FUENTE: El Mercurio